Reflexiones capítulo 1: La Tormenta

Veo llegar a La Tormenta desde muy lejos y sé que viene directa hacia mí. Teniendo la opción de huir, me siento hipnotizada por su grandeza y a veces, -casi siempre- decido aguantar un poco más por si acaso en el último momento hay un cambio de aire y me libro del chaparrón.

Su potencia y extraordinaria belleza tienen algo mágico. Me siento pequeña, frágil e insignificante ante su magnitud. Su virulencia despierta en mí el instinto de supervivencia aunque sé que es mucho más fuerte que yo, y  que de acercarse mucho, estaría a su merced.

Una vez la tengo encima, deseo haber huido a tiempo. Siempre me digo lo mismo. Con los pies anclados al suelo, me invade el frío y me calo hasta los huesos. Cuento en voz bajita: 1,2,3… Pronto pasará.
Si pudiese absorber la brutal fuerza de sus truenos y gritar con la potencia de sus relámpagos hasta quedarme sorda, sería la mujer más fuerte del mundo. Eso es Poder. Esa es la belleza más poderosa de la naturaleza.
Y cuando menos te o esperas….
Está tronando sobre mi y a la vez la veo a lo lejos, castigando otro lugar sonde hay alguien tan asustado como yo que tampoco ha huido de La Tormenta. Está observando el mismo fenómeno contando en voz bajita: 1,2,3… y preguntándose ¿cuándo pasará?
Acabará pasando, siempre lo hace. La pregunta es, ¿llegará otra después de ésta? ¿Será igual de hermosa?
…1,2,3…
En este momento puedo asegurar con toda certeza que la tormenta ha pasado dejando un silencio no tan hermoso pero a lo lejos, sobre otra persona que observa lo mismo que yo, está saliendo un arco iris. El más bonito que he visto jamás.
Elena.

 


«Those who don’t believe in magic will never find it.»

«Aquellos que no creen en la magia nunca la encontrarán»

– Roald Dahl

2 comentarios en «Reflexiones capítulo 1: La Tormenta»

    • Me alegro de que lo hayas disfrutado. Está pensado para que todo el mundo pueda darle la interpretación que más le guste. Espero que tu hayas encontrado la tuya. Un saludo

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